Era fines de enero -o inicios de febrero- de 2017. Estaba en la terraza del Capo (Giacomo, del cole), tomando un ron con Coca Cola y Red Bull con él. Después de secar el primer vaso se dejó ver la frase ganadora: «Life Well Lived». Y fue justo en ese momento que todo lo conversado fue tomando forma…¡y qué forma!
El vaso que tuvo la culpa (2017)
El día en el que se tomaron decisiones importantes (2017)
Como siempre, el fondo musical era de rock argentino. Charly, Sui Generis, Calamaro, Fito, Soda, pero también se colaba algo de algún otro lugar sudamericana (Cuarteto de NOS, por ejemplo). Las conversaciones con el Capo eran excelentes, y fue justo ese día que me confesó algo: «cholito, voy a dejar la chamba y voy a mochilear por Europa unos meses». Fue aquí en dónde la frase ganadora de la base del vaso me iluminó e hizo que mi respuesta sea una palabra que me marcó en adelante: ¡vamos!, le dije.
Ya no sé qué hacer conmigo – Cuarteto de NOS
Poco después nos juntamos con Brunito. Él, en esa época, era el más viajero -y aventurero- de los tres. Y el más loco, también. Nosotros ya teníamos los pasajes en mano, gracias al alto nivel de demencia que tuvo mi respuesta en la terraza del Capo, pero lo que hizo Bruno ese día estuvo un par de escalones por encima; del restaurante a la oficina de la compañía aérea y listo, su pasaje aéreo asegurado durante la hora de su almuerzo de trabajo.
Lo que vino después fueron coordinaciones y coordinaciones en nuestro flamante grupo de WhatsApp «Europa 2017». Bruno, por temas laborales, viajaría un mes. El Capo y yo, tras renunciar a nuestros respectivos trabajos, estaríamos tres meses al otro lado del mundo. Sin embargo, hubo un punto de quiebre en el destino por culpa mía: al ser el más afanoso al buscar varios temas sobre el viaje apareció el nombre de un lugar que movió nuestra ruta: Asia. Y así el grupo pasó a llamarse «Eurasia 2017».
Brunito llegó primero. El Capo y yo después. Primera parada: Madrid. Primer hostel en el que me quedé: Cat’s Hostel. Ellos dos ya habían tenido la experiencia de viajar así, pero para mí era la primera vez. Tenía 27 años, presupuesto justo, soltero y a dos de los mejores amigos que la vida -y el Champagnat- me pudieron dar. ¿Algo más qué pedir? Experiencias. Y así fue.
Día 1 caminando por Madrid con el Capo y Bruno (2017)
Día 2 en Madrid: rumbo a Bangkok (2017)
Y de eso se ha tratado mi vida desde aquel 22 de marzo de 2017. Experiencias y viajes. A la fecha, después de conocer poco más de 80 ciudades en 25 países, al fin me animé a empezar con esta nueva aventura, la de contar mis historias y compartir lo aprendido y viajado. Y, por qué no, ayudar en lo que esté a mi alcance a quién lo necesite -o me busque-.
Apodos he tenido algunos, desde los que no me gustaban hasta los que me encantaban, pero si hay uno con el que me he identificado desde el colegio es: «Oso». Y hoy, viviendo en Chiang Mai, Tailandia, hago mi primer post para mi blog, en el que quiero compartirles de todo un poco y, principalmente, contarles todo sobre mi ruta. O sea, La Ruta de Oso.
Charles Bridge, Praga (2021)
Genial Oso! Es viajando donde mejor se vive y viajando conoces a tus verdaderos hermanos.
Y en Giacomo encontré a un verdadero hermano, tío. Gracias por darte el tiempo de leer y dejar el mensajito. Ya se vienen las aventuras del Capo y Oso en Palma de Mallorca, acompañados de tu gran amigo. ¡Un fuerte abrazo!
Excelente Daniel, sigue adelante, eres joven y puedes alcanzar tus metas. Ya tú decidirás cuándo cumpliste tus objetivos.
Mientras tanto, cuando pases por el norte de Italia, avísame.
¡Muchas gracias, tía! Seguramente, Daniel -o el Oso- te estará contando, en cualquier momento, cuando tenga una ruta que cumplir por Italia. ¡Saludos!